El auge de las plataformas de bajo código ha traído consigo varios conceptos erróneos. Desmontemos estos mitos y comprendamos el verdadero potencial de la tecnología de bajo código para los desarrolladores en las empresas.
1. Capacidad para crear aplicaciones complejas
En contra del mito de que las plataformas de bajo código no pueden manejar aplicaciones robustas y complejas, estas plataformas ofrecen una potente alternativa al desarrollo tradicional. El bajo código es una abstracción de codificación eficiente, que mantiene la complejidad y la robustez al tiempo que reduce los esfuerzos de codificación manual hasta en un 90%. Las plataformas de bajo código para empresas han demostrado su capacidad para ofrecer aplicaciones de alta calidad.
2. Low Code como aliado del desarrollador
Muchos desarrolladores temen que las plataformas de bajo código pretendan sustituirles. El bajo código es una herramienta que mejora la productividad y la creatividad del desarrollador. Estas plataformas permiten a los desarrolladores centrarse en el valor añadido de su trabajo, aportando flexibilidad con la opción de integrar código personalizado. Así pues, las plataformas de bajo código deben considerarse un aliado, no un sustituto.
3. Integración perfecta con los sistemas existentes
Otro error común es creer que las aplicaciones de bajo código no pueden integrarse con los sistemas existentes. Por el contrario, las plataformas de bajo código están equipadas con una amplia gama de conectores para una conectividad tanto técnica como funcional. Esta capacidad permite a las empresas innovar sin quebraderos de cabeza de integración, garantizando que las nuevas aplicaciones funcionen armoniosamente con los sistemas existentes.
4. Curva de aprendizaje y accesibilidad
La creencia de que las plataformas de bajo código requieren una amplia formación es engañosa. La mayoría de la gente puede comprender los fundamentos de estas plataformas en pocos días, gracias al uso de marcos familiares como Angular para el desarrollo front-end. Este enfoque reduce la curva de aprendizaje y hace que la transición al desarrollo de bajo código sea más intuitiva.
Conclusión:
Las plataformas de bajo código están revolucionando la forma en que los desarrolladores abordan la creación de aplicaciones. Al disipar estos mitos, podemos apreciar el bajo código como una poderosa herramienta en el viaje de la transformación digital, abriendo oportunidades para una gama más amplia de empresas.
